Receta de estofado de garbanzos con panceta, chorizo y morcilla
Este estofado de garbanzos con panceta, chorizo y morcilla es una receta contundente y deliciosa, ideal para disfrutar de un plato de cuchara como los de antes.
Este estofado de garbanzos con panceta, chorizo y morcilla es una receta contundente y deliciosa, ideal para disfrutar de un plato de cuchara como los de antes. Los garbanzos son esas legumbres cargadas de buenas sensaciones y de fibra que deben llegar a la mesa en todo menú semanal. Complementaremos este ingrediente básico con una serie de carnes, la panceta le aportará la grasa necesaria para triunfa, que con el chorizo y la morcilla conseguirán destacar. Si te apetece disfrutar de un plato único exquisito, toma nota de este estofado de garbanzos con panceta, chorizo y morcilla, te encantará.
Ingredientes:
Cómo preparar un estofado de garbanzos con panceta, chorizo y morcilla
- Este estofado se cocina con un sabor especial como los de antes. Vamos a pelar y trocear una cebolla cortada en trocitos pequeñitos. La ponemos con un buen chorrito de aceite en una sartén.
- Mientras se cocina la cebolla, pelamos y cortamos el ajo muy finito. Pelamos el tomate y lo rallamos. Cuando vemos que la cebolla empiece a estar tierna le añadimos estos dos ingredientes.
- Los garbanzos pueden ser precocinados o cocinados al momento. Adelantaremos tiempo si los tenemos ya listo. Simplemente los escurrimos y añadimos al estofado directamente.
- Pelamos las patatas y las añadiremos a este sofrito con los garbanzos. Este ingrediente le dará un sabor y textura tradicional, además de completar el plato.
- Cubrimos con el caldo y añadimos una hoja de laurel. Debemos dejar que estos ingredientes se vayan fusionando poco a poco, hasta conseguir una base repleta de sabor.
- Nos ponemos mientras, manos ala obra con las carnes. Cortamos la panceta en trocitos del mismo tamaño. Los vamos a saltear en una sartén, no es necesario añadir aceite, se irán cocinando poco a poco con su propia grasa.
- El chorizo también lo cortaremos en taquitos y lo añadimos a la sartén. Repetiremos la operación con la morcilla. Dejamos que se cocinen unos 5 minutos y reservamos.
- Esta carne la vamos a incorporar al estofado cuando falten unos 8 minutos para que la patata esté lista. Nos interesa que se mezclen a la perfección todos los sabores, encontrarse un poco de morcilla entre una cucharada de garbanzos no tendrá precio. Cuando estén listas las patatas paramos el fuego.
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